La neurociencia ha demostrado que los cuentos tienen un impacto profundo en el cerebro humano. A través de la narración, se activan múltiples áreas cerebrales que no solo procesan el lenguaje, sino también las emociones, la memoria y la imaginación. Aquí hay algunos
puntos clave sobre la relación entre la neurociencia y los cuentos:
En resumen, los cuentos no solo son herramientas culturales, sino que tienen un impacto tangible en el cerebro humano, fomentando la empatía, el aprendizaje y el bienestar. Su valor va más allá del entretenimiento, siendo fundamentales para nuestra evolución como seres sociales y emocionales.