El principio de la manifestación y una salud equilibrada
El principio de la manifestación es la clave para que nuestros deseos se hagan realidad. Para ello, tenemos que saber que la mayorÃa de personas aceptamos este hecho: que Dios es la fuente real o el creador de todas las cosas y que los humanos estamos hechos a su imagen y semejanza.
 Por lo tanto, somos co-creadores con él y es por eso que la biblia nos enseña que él plantó un jardÃn y que el hombre tenÃa que extenderlo por toda la tierra. ¿Por qué? Porque tiene capacidades para hacerlo.
Asà que, podemos decir que él, al crearnos, nos dotó de capacidades que nos facilitan crear esta realidad. Es decir, que nuestros deseos se conviertan en realidad. Asimismo, nuestro organismo está diseñado precisamente para esto.
Cómo podemos armonizar los verbos Ser, Tener y Hacer
De manera que, tenemos que armonizar los verbos: ser, tener y hacer. Para ello, los verbos tener y hacer se canalizan en el hemisferio izquierdo y el ser se canaliza en el hemisferio derecho. Pero, cuando trabajan armoniosamente, da lugar a que se active la capacidad de crear nuestra realidad o de que nuestros deseos se conviertan.
Sin embargo, cuando nos estresamos de una manera crónica, se desconecta del hemisferio y toma control el hemisferio izquierdo, el cual empieza a dominar nuestra vida.
Haciendo que esto dé prioridad al hacer y tener, lo que hace que se centre en ese cÃrculo vicioso de las descoordinaciones y separaciones de los hemisferios.
Como resultado, hará que estemos orientados a querer buscar las soluciones fuera de nosotros. Podemos llegar a ser muy analÃticos, muy crÃticos y egoÃstas. Esta actitud de manifestación se debe al ego, lo que produce que no logremos nuestros objetivos, ya que para lograr estos objetivos debemos dar atención al ser.
El ser es patrimonio del hemisferio derecho. Cuando se da atención y se armoniza con el hacer, se alcanzan los objetivos que están alineados con el nivel de desarrollo de nuestro ser. Por ejemplo, si tenemos un ser pobremente desarrollado, aunque hagamos o queramos lograr nuestro objetivo, no lo vamos a cumplir.
Cómo se manifestará si activamos nuestro ser interior
Asà que, para vivir en el nivel máximo de nuestro potencial tenemos que activar nuestro ser interior. Cuando vivimos de acuerdo a nuestro valores, creencias, y estos están armonizados con nuestra esencia divina como el amor, sabidurÃa, justicia y el poder, nuestra vida comienza a funcionar mejor.
Esto hace que no queramos cambiar lo exterior, sino lo interior, ya que de ello depende nuestro alrededor. Por otro lado, cuando nos centramos en el ser daremos prioridad a nuestros valores prioritarios y nos sentiremos bendecidos al estar cumpliendo nuestros deseos. Por ejemplo, si sentimos amor, de manera inmediata vamos a expresar gratitud, lo que crea una coherencia entre nuestra vida interna y en nuestra en nuestra vida externa.
Cómo potenciar la capacidad del principio de la manifestación
De hecho, sà podemos potenciar esta capacidad y lo logramos cuando nos centramos en los sentimientos positivos, ya que esto hará que se amplifiquen. También, podemos centrarnos en pensamientos positivos que potencian ese desarrollo del ser. Por ejemplo, el simple hecho de pensar en qué puedes hacer ante dicha situación, cómo te sentirás después de superarlo, nos permitirá tener una perspectiva amplia de lo que podemos hacer en ese momento.
Para ello, es muy importante activar los sentimientos y sensaciones que vamos a tener cuando logramos el objetivo. Asà que, nuestra manifestación debe ir de acuerdo a lo que queremos vivir y sentir para cumplir nuestras metas. De modo que, asà podremos tener ese pulso natural para tomar las acciones y pensamientos adecuados y asà alcanzar nuestros deseos.
Si manifestamos lo que deseamos, podemos cumplirlo
Cuando llevamos nuestro nivel del ser al mismo nivel de una persona merecedora del cumplimiento de este deseo, entonces nuestros deseos se convierten en realidad. Por ejemplo, si tu sueño es tener un sueldo X, pues tenemos que desarrollar las capacidades y habilidades de una persona que merece ser pagado con ese sueldo. Cuando estamos en ese nivel de manifestación, los resultados llegan solos, como consecuencia de esa transformación de nuestro ser.
Normalmente, tendemos a que nuestro ser tenga un nivel de conciencia que espera en lo mÃnimo o básico. Entonces en ese nivel predomina el hacer y el tener y eso es ya porque, la mayorÃa de las personas, no consiguen sus objetivos. Lo que hace es que su nivel de ser no esté funcionando en esos niveles bajos, como es el miedo, la vergüenza, la culpa, que son los que mayormente damos uso cuando se activa nuestro hemisferio izquierdo, y el cual nos impide desarrollar nuestro ser.
Esto sin duda, si recordamos, lo hemos heredado de Adán y Eva cuando desobedecieron. Cambiaron su comportamiento, por ejemplo, empezaron a esconderse de su creador, reflejaron o manifestaron que tenÃan miedo y vergüenza, y empezaron a echarle la culpa a la serpiente, a la mujer e incluso hasta al mismo creador.
Por lo tanto, tenemos que tomar conciencia de que tenemos esos miedos y que han sido heredados y que esas expresiones de culpa cuando tomamos conciencia de ello es cuando tenemos la opción de cambiarlas.
Para ello, este cambio de manifestación tiene que ser continuo, para asà lograr un desarrollo constante y este se vaya elevando hasta alcanzar el nivel que nos capacita para conseguir esos cambios positivos para nuestro entorno.
Por qué no debemos enfocarnos en los comportamientos negativos
Asà que, si superamos el miedo, la culpa, la vergüenza estamos facilitando alcanzar la plenitud en nuestra vida. Por ello, si damos atención al ser, que está dominado por el hemisferio derecho, activaremos cualidades divinas como hemos mencionado anteriormente. El poder y el amor es el antÃdoto al miedo, creando en nosotros un impulso de buscar y desear el bien, tanto para nosotros como para nuestro entorno. Por consiguiente, ese estado de manifestación se asocia al desarrollo pleno de todos los seres. Asà que, cuando se activa el amor, hace que siempre se busquen nuevas maneras de seguir mejorando para llegar al bien. Esta búsqueda del bien nos empodera y nos pone en condición de atraer a nuestra vida todo aquello que deseamos y que está en armonÃa con nuestro grado de desarrollo del ser.
Asà que tenemos que elevar el nivel de conciencia del ser para vivir a plenitud con todo nuestro potencial. Para ello, tenemos que apoyarnos en este estado, por ejemplo, cuando estamos ante un desafÃo para poder salir airosos.  Como resultado, creará un cÃrculo virtuoso, que nos empodera y que hace que nos concentremos fácilmente en las cosas que nos hacen felices. Además, nos facilitará identificar las verdaderas causas que están detrás de las invasiones negativas, pensamientos negativos y comportamientos negativos. Esto, sin duda, al no estar adaptados, hacen que no cambiemos nuestra vida.
Palabras positivas en nuestro vocabulario
Por otro lado, también debemos cambiar nuestro vocabulario, para ello, debemos utilizar palabras que nos lleven a lo que queremos.
Estas palabras nos llevan a pensamientos positivos, de manera que genera sentimientos armonizados que ayudarán a conseguir nuestra transformación, a esto lo llamamos: el vocabulario de la transformación.
Qué tenemos que hacer para lograr tener un principio de manifestación
Para lograrlo tenemos que hacer un trabajo continuo y vigilar nuestros hábitos, nuestras palabras, nuestros comportamientos, nuestros sentimientos y ser más conscientes de ellos.
Cuando establezcamos por modelos los sentimientos positivos, activamos las ondas alfas que nos impulsaran a tener acciones pertinentes. De modo que nos ayudarán a hacer frente a los desafÃos y situaciones negativas para poder cambiarlos. Sin embargo, habrá un momento en que nuestro impulso natural será positivo y recordaremos más fácilmente los momentos agradables del pasado, lo que nos estimularán aún más ese estado de positividad.
Beneficios para nuestra vida
Los cambios en nuestras decisiones y comportamientos, nos ayudará de manera positiva en nuestra vida y en nuestro entorno. Asà que podemos afirmar que los pequeños cambios o coincidencias positivas que han ocurrido en nuestra vida, no han sido en vano. Más bien, cuando nos centremos en ella, estaremos agradecidos y mostraremos gratitud, la cual se irá multiplicando. Asà que, para lograr grandes objetivos en la vida es necesario que contribuyamos a hacer el bien, tanto para nosotros como para el entorno. Si empezamos hacer pequeños cambios, se darán las cosas antes.
Por lo tanto, nuestra determinación es cambiar nuestro mundo y nuestro ser. Cuando pasemos por situaciones desafiantes, debemos definirlas de manera diferente a como lo hacÃamos habitualmente. Más bien, debemos dar atención a los aspectos positivos de la situación y minimizar lo negativo. Este fuerte condicionamiento que tenemos en nosotros debido a nuestras creencias limitantes, lo podemos mejorar asociando las situaciones con los pensamientos, palabras positivas. Además, podemos asociarlo con personas que han logrado objetivos que nosotros pretendemos lograr.
Cómo dominar nuestras emociones para cumplir nuestras metas
Asimismo, debemos definir las emociones con mucha fuerza, hacer preguntas positivas. Asà como también, crear hábitos que conviertan nuestros deseos en realidad. Es decir, alinear nuestros hábitos al nivel de consciencia o las zonas que han alcanzado los deseos que queremos lograr. Para ello, debemos tener una clara decisión de estar dispuestos a hacer reajustes en nuestros hábitos para convertirnos en personas merecedoras.
Asà que, comprometámonos a tomar decisiones que tal vez nos puedan asustar, pero que si nos centramos en ellas, nos van a sacar de nuestra zona de confort, y, por lo tanto, nuestra transformación será más fácil. Si realmente quieres ver grandes cambios positivos en ti y poner en práctica el principio de la manifestación, pero, sobre todo, eliminar lo que hace que trunques en tus metas, en nuestra escuela bienestar estamos para ayudarte. Por ello, contáctate ahora mismo con nosotros sin ningún compromiso.